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La prevención del cáncer de mama es una preocupación que ha impulsado campañas de concienciación, investigaciones científicas y programas de detección temprana auspiciados por instituciones gubernamentales y ONGs.
Sin embargo, aún existe mucha desinformación respecto a las medidas de prevención para el cáncer de mama. Una gran parte de la población no sabe cuál es el impacto de esta enfermedad en el mundo, y desconoce qué se puede hacer para prevenirla o detectarla a tiempo.
En este artículo te explicamos qué es el cáncer de mama, cuáles son algunos de sus principales síntomas, y qué medidas de prevención te pueden ayudar a mantenerte libre de esta enfermedad.
ÍNDICE
¿Qué es el cáncer de mama?
El cáncer de mama es una enfermedad que se produce en el tejido mamario, cuando las células de la mama se multiplican sin ningún tipo de control. Es uno de los tipos de cáncer más comunes en todo el mundo, y afecta tanto a mujeres como a hombres, aunque en estos últimos es poco frecuente.
Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, existen distintos tipos de cáncer de mama, que se diferencian en función del tipo de células que se vuelven cancerosas. Los más comunes son el carcinoma ductal infiltrante y el carcinoma lobulillar infiltrante.
Factores de riesgo
La lista de factores de riesgo del cáncer de mama es muy amplia, sin embargo, existen algunos que se destacan sobre los demás. Los más importantes son la historia familiar, la edad y los factores genéticos.
Para ayudarte a comprender mejor esto, te explicaremos con más detalle cuál es el impacto de cada uno, y cómo pueden contribuir a la aparición de esta enfermedad.
Mutaciones genéticas
Entre el 5% y el 10% de los casos de cáncer de mama se producen por factores hereditarios, bien sea por la genética que se heredó del padre o de la madre. Generalmente, se produce por mutaciones genéticas que tienen lugar en los genes BRCA1 y BRCA2, aunque las personas que tienen mutaciones en los genes TP53 y PTEN, también tienen riesgo de sufrir esta enfermedad.
El factor genético, como se puede ver en los porcentajes que recién mencionamos, no es uno de los principales causantes del cáncer de mamá, sin embargo, es necesario tenerlo presente, porque afecta a una gran cantidad de personas en todo el mundo.
Realizar pruebas genéticas puede ayudar a descartar cualquier problema, y es fundamental para la prevención del cáncer de mama.
Antecedentes familiares
Los antecedentes familiares también juegan un papel muy importante en la aparición del cáncer de mama, ya que el riesgo de sufrir de esta enfermedad es mayor si alguien de la familia la ha tenido, bien sea por el lado materno o paterno.
El riesgo también aumenta cuando se ha tenido cáncer de ovarios, así que se debe estudiar bien si hay algún caso de cáncer de mama o de ovarios en la familia.
Edad
La edad es un factor determinante en la prevención contra el cáncer de mama, ya que la mayoría de los casos se suelen presentar después de los 50 años de edad. A medida que las personas envejecen las células mamarias están más expuestas a mutaciones genéticas y daño celular, sin contar que envejecer debilita los sistemas de reparación del ADN.
Esto no quiere decir que las personas mayores sean las únicas que sufren de cáncer de mama, porque existen muchos casos en los que la enfermedad se ha desarrollado en mujeres jóvenes.
Las medidas de prevención para el cáncer de mama no aplican solo para personas mayores, sino que se deben aplicar de forma general durante todas las etapas de la vida, desde la adolescencia hasta la vejez.
Síntomas del cáncer de mama
Cualquier programa de prevención de cáncer de mama debe empezar por explicar algunos de sus síntomas más importantes. Comprender de qué manera se manifiesta la enfermedad permite a las personas buscar ayuda médica en el momento oportuno y aumentar la efectividad de los tratamientos.
Según MedlinePlus, algunos de los síntomas comunes del cáncer de mama son:
- Aparición de bultos en los senos o las axilas.
- Cambios en la forma y el tamaño de los senos.
- Cambios en la apariencia de la piel de los senos.
- Dolor en las mamas o los pezones.
- Secreción en alguno de los dos senos.
En las primeras etapas del cáncer de mama no se suelen presentar síntomas, por lo que es probable que, si se experimenta alguna de estas señales, el cáncer haya avanzado.
¿Por qué es importante la prevención del cáncer de mama?
Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), tan solo en el año 2020 más de 2 millones de mujeres fueron diagnosticadas con cáncer de mama, de las cuales 685.000 murieron. Este tipo de cáncer es uno de los más prevalentes en el mundo, y su impacto sobre la salud y el bienestar de las mujeres es muy profundo.
La prevención es una de las herramientas más útiles en contra del cáncer de mama, ya que reduce su incidencia y minimiza sus consecuencias. Hay que tener presente que este cáncer es más fácil de prevenir que otros y, por ello, se promueven políticas de prevención y detección temprana en todo el mundo.
Medidas de prevención para el cáncer de mama
El cáncer de mama es un problema que afecta a un número muy grande de personas en todo el mundo, y por ello es necesario contar con herramientas que ayuden a prevenir o detectar la presencia de esta enfermedad en sus primeras etapas.
La educación y la concienciación sobre la salud mamaria tiene un papel sumamente importante, ya que permiten que las personas tengan un papel más activo en su cuidado personal. En este sentido, es importante aprender a identificar los síntomas y familiarizarse con la anatomía de las mamas para detectar cualquier anomalía que se presente.
A continuación, veremos con detalle cuáles son estas medidas y cuáles son algunas de sus implicaciones más relevantes.
Autoexamen de mama
Una de las medidas más accesibles para prevenir y detectar de forma temprana esta enfermedad, es el autoexamen de mama. Aunque no es tan efectivo como una mamografía u otros exámenes médicos, les permite a las mujeres identificar cualquier anomalía que se presente en sus senos, y buscar atención de un especialista en el momento oportuno.
La detección temprana es muy útil, porque los tratamientos son más efectivos en las primeras etapas del cáncer de mama. Esto aumenta las probabilidades de que la persona se recupere y quede libre de la enfermedad.
¿Cómo realizar un autoexamen de mama?
Para realizar el autoexamen de mama existen diferentes métodos, sin embargo, el más común es observar y hacer palpaciones sobre los senos frente a un espejo de cuerpo completo. La idea es buscar cambios en la textura o la coloración de la piel, además de revisar si existen bultos o protuberancias en las mamas.
Conoce los pasos en más detalle
Mamografías
Según Cancer.org las mamografías son una de las mejores formas de detectar el cáncer de mama mientras se encuentra en sus primeras fases. Además, es un procedimiento muy rápido y relativamente sencillo.
A diferencia del autoexamen de mama, con las mamografías es posible detectar anomalías, aunque no sean visibles o palpables, ya sea que se trate de microcalcificaciones, tumores benignos, quistes o masas sospechosas.
Lo ideal es que después de una mamografía en la que se haya detectado alguna protuberancia, se haga un seguimiento médico para determinar de qué se trata. En una gran parte de los casos puede tratarse de masas benignas, pero es necesario hacer biopsias y otras pruebas para descartar que se trate de cáncer de mama.
Terapia preventiva
Según la American Cancer Society, es posible utilizar algunas estrategias médicas y farmacológicas en la prevención del cáncer de mama. Existen varios medicamentos que ayudan a reducir el riesgo de sufrir esta enfermedad, aunque es importante asesorarse bien por un equipo médico y conocer cuáles son sus efectos secundarios antes de utilizarlas.
Los medicamentos que se suelen utilizar para la prevención del cáncer de mama son el tamoxifeno y el raloxifeno. Asimismo, es posible utilizar algunos inhibidores de aromatasa y moduladores selectivos de los receptores de estrógeno.
¿La lactancia reduce el riesgo de sufrir de cáncer de mama?
Diferentes estudios médicos han establecido una correlación directa entre la lactancia materna y la disminución del riesgo de sufrir cáncer de mama. Según Cancer Research UK, cuanto más tiempo se amamante a un bebé, menor es el riesgo de tener este tipo de cáncer.
Esto sucede porque la lactancia reduce los niveles de estrógeno en el cuerpo, lo que reduce la estimulación de las células mamarias y puede disminuir la probabilidad de cambios celulares malignos.
De igual manera, hay que destacar que la lactancia materna hace que las células mamarias sean menos susceptibles a mutaciones genéticas, un factor que como vimos antes, está asociado a la aparición del cáncer de mama.
Fuentes:
- https://www.cdc.gov/spanish/cancer/breast/basic_info/what-is-breast-cancer.htm
- https://www.cdc.gov/cancer/breast/young_women/bringyourbrave/hereditary_breast_cancer/index.htm
- https://www.who.int/news-room/fact-sheets/detail/breast-cancer
- https://www.cancer.org/cancer/types/breast-cancer/screening-tests-and-early-detection/mammograms/mammogram-basics.html