Descubre cómo desarrollar tu motivación para hacer ejercicio

¿Por qué es importante la motivación para hacer ejercicio?

Según un artículo publicado por la National Library of Medicine, la motivación es un factor crítico, que influye en la capacidad que puede tener una persona para realizar ejercicio de manera prolongada.

Muchas personas encuentran más atractivas otras actividades, y prefieren invertir su tiempo en ellas. Sin embargo, cuando se tienen buenas razones y se está motivado para hacer ejercicio, se pueden dejar de lado las excusas, y sobreponerse a la falta de resultados inmediatos.

Las personas motivadas tienden a mantener su compromiso con el ejercicio, por lo que no solo se conforman con ejercitarse de manera esporádica, sino que son constantes y hacen lo posible por mantener su rutina de entrenamiento en el largo plazo.

Estrategias para motivarse a hacer ejercicio

Conseguir la motivación para hacer ejercicio no siempre resulta una tarea sencilla, la mayoría de las personas suele encontrarse con obstáculos significativos como la falta de tiempo y el cansancio.

Además, cuando se tienen expectativas exageradas sobre los resultados que se pueden lograr, es posible que se genere una sensación de frustración y que sea más difícil encontrarle sentido a ejercitarse.

Por ello, es importante cambiar de enfoque y valerse de algunas estrategias que pueden ser muy útiles para estimular la motivación. De esta manera, se puede disfrutar más de hacer ejercicio, y se pueden obtener muchos beneficios a largo plazo.

Establece metas realistas que puedas alcanzar

Better Health destaca que una de las estrategias con las que se puede conseguir motivación para seguir haciendo ejercicio es establecer metas realistas que sean fáciles de alcanzar. Hacer esto puede generar una sensación de logro que fortalece la motivación intrínseca.

Lo ideal es que se empiece con metas pequeñas, y que de manera progresiva se vaya incrementando la dificultad. De esta manera se fomenta la constancia y la consistencia, y se genera un ciclo de motivación, porque las personas desean avanzar y alcanzar nuevas metas.

Cuando las metas son muy ambiciosas y difíciles de lograr, es normal sentirse abrumado, porque lo que se quiere lograr parece inalcanzable. Esto no solo genera frustración y estrés, sino que hace que las personas pierdan la confianza en sí mismas y renuncien a lo que se habían propuesto.

Identifica cuáles son las razones que te mueven a hacer ejercicio

Tener claro cuáles son los motivos por los que se desea hacer ejercicio es algo fundamental, ya que sobre ellos es que se sostiene la motivación.

De manera general, podemos decir que la motivación se divide en dos tipos: motivación intrínseca y motivación extrínseca. En el ejercicio, la motivación intrínseca puede manifestarse cuando se disfruta la actividad física en sí misma; mientras que la motivación extrínseca se basa en factores o recompensas externas.

Cuando las personas hacen ejercicio porque se preocupan por su bienestar físico, emocional y mental, resulta más sencillo mantenerse motivado. Por otra parte, cuando la motivación depende de factores externos como la admiración de los demás, es muy probable que la motivación no se mantenga en el largo plazo.

Las razones por las que una persona decida ejercitarse son válidas, pero es importante que se reconozca la importancia del ejercicio para la salud, y que se desarrolle una motivación que no solo dependa de factores externos.

Encuentra una actividad que disfrutes

Una de las recomendaciones de Better Health (citado anteriormente) para mantener la motivación en el ejercicio es encontrar una actividad de la que se pueda disfrutar, que se pueda llevar a cabo sin ningún tipo de problema, y que se adapte al estilo de vida que se tiene. Si no se disfruta de lo que se hace, es muy probable que con el paso del tiempo se abandone el ejercicio que se eligió.

No es necesario saber esto desde el primer momento, ya que se puede probar con diferentes actividades físicas hasta que se encuentre la correcta. Además, hay que tener presente que cuando se habla de hacer ejercicio no se hace referencia exclusivamente a levantar pesas en un gimnasio, porque también es posible hacer natación, senderismo o practicar un deporte como fútbol o tenis.

Busca compañía para hacer ejercicio

La mejor forma de obtener motivación para hacer ejercicio es consiguiendo una o más personas que tengan los mismos objetivos, y que también disfruten de realizar alguna actividad física. La compañía puede hacer que el ejercicio sea más entretenido y agradable, por lo que todo resulta más sencillo.

En muchos casos, el ejercicio se puede convertir en un momento social en el que se comparte con otras personas. Asimismo, los compañeros de entrenamiento pueden actuar como una fuente de motivación, ya que pueden desafiarse entre sí para mantenerse comprometidos con la rutina de ejercicios.

¿Cómo lidiar con la presión de obtener resultados rápido?

Muchas personas se sienten presionadas por obtener resultados rápidos, lo que puede reducir su motivación para empezar a hacer ejercicio y hacer de la actividad física algo estresante. Es importante saber lidiar con esto y sobreponerse al deseo de ver los resultados de inmediato, porque en la mayoría de los casos los cambios suelen tardar un tiempo.

Es fundamental tener una visión desde la que el ejercicio se tome como un proceso, entendiendo que cualquier progreso implica tiempo. En lugar de enfocarse únicamente en los resultados finales, es importante valorar y celebrar los pequeños logros y avances a lo largo del camino.

¿Hay maneras de hacer que el ejercicio se convierta en una actividad divertida?

El ejercicio puede ser una actividad muy divertida, y según la British Heart Foundation, existen algunas estrategias muy útiles para lograrlo. Dentro de estas estrategias, se resalta la importancia de compartir el ejercicio con otras personas, bien sea con amigos, familiares o compañeros de trabajo.

De igual manera, se puede utilizar la música o la televisión como una distracción que haga más agradable la actividad y ayude a hacer ejercicio durante períodos de tiempo más largos.

¿Cuáles son los beneficios del autocuidado y el ejercicio físico?

La lista de beneficios de hacer ejercicio es muy amplia, e incluye tanto beneficios para el cuerpo como para la mente. Quienes se ejercitan de manera regular pueden prevenir la aparición de ciertas enfermedades, tener un mejor estado de ánimo y una mayor calidad de vida.

Impacta en el bienestar mental y emocional

Como ya hemos mencionado, el ejercicio no solo ayuda a que el cuerpo esté en mejor estado, sino que también contribuye significativamente a la salud mental de las personas. La actividad física regular se ha asociado con una mejor función cerebral, incluida la mejora en la memoria, el enfoque y la capacidad de concentración, sin contar con que también ayuda a reducir los niveles de estrés y ansiedad.

En muchos casos, el ejercicio se convierte en una actividad para desconectar de las preocupaciones diarias y despejar la mente. Precisamente por esto, muchas personas salen a correr por las mañanas o por las noches, ya que más allá de la apariencia, este tipo de ejercicio puede contribuir de forma general a su bienestar.

Fortalece los músculos y los huesos

Hablando de los beneficios del ejercicio, el Centers for Disease Control and Prevention señala que algunas actividades como el levantamiento de pesas son muy útiles para mantener la masa y la fuerza muscular, sobre todo cuando se envejece.

Generalmente, cuando nos ejercitamos, los músculos se contraen y se relajan, lo que no solo fortalece y tonifica los músculos, sino que también mejora su resistencia y flexibilidad. De igual manera, se promueve la densidad ósea, y se reduce el riesgo de sufrir de enfermedades como la osteoporosis.

Permite llevar una vida más saludable

Para finalizar, tenemos que hablar de algo que impacta directamente en la motivación para hacer ejercicio, y es que practicar cierto tipo de actividades físicas contribuye a que las personas tengan una vida más saludable.

El ejercicio fortalece el corazón, mejora la circulación sanguínea y reduce el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares como los accidentes cerebrovasculares. Asimismo, sirve para regular el peso corporal, y fortalecer la autoestima.

Desde cualquier punto que se analice, el ejercicio tiene enromes beneficios para quienes lo practican, y muchos de ellos pueden ser una fuente de motivación para quienes aún no han tomado la decisión de empezar a ejercitar su cuerpo.